Estas palabras solamente puede salir de un gran ser humano
que ha convivido, aprendido de la miseria humana y que
ha ayudado a otros seres humanos para salir de su sufrimiento.
No se necesita 5 años o más de psicología, este gran hombre
ha aprendido de la vida misma.
Dejo sus palabras:
Los seres humanos no somos lobos solitarios, los seres humanos no
hemos nacido para estar solos, ni para tragarnos las bilis, los problemas
de la vida en soledad. Los seres humanos no tenemos que morir amargados
porque nadie me quiere, nadie me escucha. Yo creo que la única solución
que hay es la de salir al encuentro de otro ser humano, nos necesitamos.
Los seres humanos necesitamos unos de otros y entonces cuando estas
viviendo en esas circunstancias y en esos problemas tienes angustias.
Cuando estás en la oscuridad, cuando estás experimentado
cosas del mal, cuando te sientes muy débil, cuando a veces ya piensas que la
vida no vale la pena, ese llamado encuentro con otro ser humano hace una gran
diferencia. Yo creo que cuando haces ese esfuerzo, tu vida comienza a cambiar.
Cuando eres capaz de poder compartir tu oscuridad con alguien que te puede
ayudar a encender una pequeña llamita de luz en tu vida, puedes empezar a
cambiar. Pero si te quedas sol@, si te quedas escondid@, si te quedas con
tu propia miseria, estoy seguro que es muy difícil salir de ese agujero negro
en el que estás. Por eso mi consejo es encontrarse con otro ser humano.
El que lo necesita buscará ayuda, el que no necesita ayuda, salir al
encuentro del que lo necesita, porque todos necesitamos ayuda de
todos.
Javier del Bosque ex sarcedote, misión humanitaria en Brooklyn
en los finales de los 70 del siglo 20.
Transcripción de la entrevista de Iker Jimenez en Milenio 3.