¿Por qué los atentados en París nos ha conmocionado tanto y nos ha calado hasta en lo más profundo del alma? Porque fue en París donde precisamente sus ciudadanos se levantaron contra la tiranía, la opresión, la desigualdad y los privilegios de unos pocos sobre el pueblo sometido en la servidumbre despótica. Hartos de miseria, el pueblo se levantó contra la tiranía, y marcó un precedente en la historia de la humanidad que fue la revolución francesa que cambió totalmente Europa. Gracias a la determinación de los parisinos, se abolió el antiguo estamento social, donde se impuso una constitución creada por el pueblo y se  dio a promulgar la declaración universal de los derechos de hombre, donde se otorga por primera vez en la historia la igualdad, la fraternidad y la libertad. Esta declaración ha servido de marco para que todos los países de Europa crearan sus constituciones siguiendo el modelo de la revolución francesa. Gracias al espíritu parisino, sirvió de inspiración para que otros países se levantaran contra la tiranía, como en Rusia durante su revolución. La insignia de la revolución contra la opresión es la bandera tricolor que surgió precisamente del pueblo de París, de su escudo municipal. En estos días la bandera tricolor ha sido ultrajada con la sangre de sus ciudadanos, los mismos cuando sus antepasados lucharon  y dieron su sangre por una humanidad mejor. Los agentes del terror, del fanatismo han sabido dar precisamente un duro golpe al corazón de Europa, a la ciudad de la libertad. Le debemos mucho a los ciudadanos de París, sin ellos  la historia social de Europa y del mundo hubiera sido totalmente diferente. Hoy la bandera de la libertad está de luto por los mismos tiranos que provocan el terror en propios países y atentan contra sus pueblos, contra la libertad.